Por esto, comparto contigo lo que realmente me llena, me caracteriza y soy…
Una mujer de amarillo que un día decidió ver la vida diferente, con alegría y optimismo sabiendo que en ocasiones llegan tormentas, pero que el día a día nos depara oportunidades también.
Cuando dejé de buscar el amor lo encontré, pero primero me encontré yo.
Mi primer viaje sola lo hice a los seis años. Mi alma viajera se lo debo a mis padres.
En siete años he vivido en ocho destinos. ¿Qué aprendí? A ser mucho más flexible, a adaptarme mejor, a ser más independiente y, sobre todo, aprendí a conseguir metas sola y acompañada.
¿Sabes? La vida es ahora, ¡no hoy!